'En psiquiatría infantil hay que prevenir, porque curar es difícil'.
María Jesús Mardomingo, psiquiatra infantil
Desde el útero hasta los primeros 4 años de vida el cerebro se desarrolla a contrarreloj y se asientan los mecanismos más importantes para enfrentar la vida. En este breve tiempo, por ejemplo, se desarrolla la regulación de la respuesta al estrés y la base de las emociones. La pronta detección de cualquier trastorno es vital para mejorar las intervenciones y la vida futura de los niños. Cada año, cada mes que pasa sin actuar hace que ese cerebro madure de una forma que complica las actuaciones terapéuticas o educativas futuras.
“En los Estados Unidos, el 17% de los niños presenta
discapacidades en el desarrollo o la conducta tales como: autismo, discapacidad
intelectual o trastorno de déficit de
atención con hiperactividad. Adicionalmente,
muchos niños presentan retraso en el lenguaje y otras áreas”.
El suicidio, que puede ser el resultado de la interacción de
los trastornos mentales con otros factores, fue la segunda causa principal de
muerte entre los adolescentes de 12 a 17 años en 2010.